Combatir el alquiler turístico ilegal y mejorar la situación del alquiler residencial es el principal objetivo de la campaña masiva de inspección de alquileres turísticos que ha lanzado el Consell de Ibiza. El presidente de la institución, Vicent Torres, afirmó: «Advertiremos poco. Queremos actuar. Advertidos ya están».
Con seis inspectores y un letrado del Consell, la institución insular intentará acabar con un buen número de alquileres ilegales a través de una nueva herramienta que facilita el trabajo desde la oficina. Se trata de una aplicación informática que permite rastrear las principales webs de comercialización de alquileres de viviendas. «Todas las viviendas vacacionales legales deban hacer público su número de registro en todas sus publicaciones comerciales», advierte el Consell. Desde la institución avisan de que las sanciones pueden alcanzar hasta los 40.000 euros, invitan a cerrar la puerta a los alquileres irregulares.
La otra cara del éxito
El éxito de la isla como destino turístico tiene otra cara, «como son las problemáticas sociales, el impacto medioambiental y la saturación territorial y de las infraestructuras», expresa Torres, quien considera que «ni podemos demonizar el turismo, como pretenden algunos, ni podemos dar la espalda a todos estos problemas, como han hecho otros».
El presidente de la Asociación de Viviendas y Alojamientos Turísticos de la Pimeef, Roberto San Esteban, expresa la necesidad de buscar fórmulas para atajar «tanto los alojamientos ilegales como la proliferación de intermediarios y mediadores ilegales y alegales». El representante del colectivo alerta de la situación: «Hay muchas mafias trabajando ilegalmente en la isla. ¿Qué hacen? Pagan en metálico por adelantado alquileres sin contrato legal, y después hacen lo que quieren».
Desde el Consell inciden en la importancia de acabar con esta situación, y señalan que en la actualidad se están alquilando viviendas como si fueran alojamientos turísticos, incluso despiezando los inmuebles por habitaciones y ofreciendo el alquiler en habitaciones compartidas.
Requisitos para el alquiler legal
Según la actual normativa, se considera un alquiler turístico la cesión temporal a cambio de precio de una vivienda completa (con determinadas características) en la que se ofrecen servicios turísticos, y se ofertan por canales de comercialización turística. Esta actividad, recuerda el Consell, «obliga a los propietarios a presentar una declaración responsable».
Las condiciones imprescindibles para poder legalizar una vivienda destinada a alquiler turístico son, en primer lugar, que sea una vivienda aislada, única en la parcela, aunque también puede ser adosado en los casos de dos viviendas dentro de la misma parcela sometida al régimen de propiedad horizontal, y viviendas que se ubiquen en diferentes parcelas y se encuentren adosadas por una pared.
«Su capacidad máxima es, en todos los casos, de seis dormitorios y 12 plazas —indican desde el Consell de Ibiza—. Por tanto, está prohibido el alquiler turístico en edificios plurifamiliares (bloques de pisos) o adeosados sometidos al régimen de propiedad horizontal».
Solo 1.500 alojamientos legalizados
La primera oleada de inspecciones a través de la nueva aplicación del Consell de Ibiza ha detectado entre 15.000 y 20.000 camas susceptibles de ser ilegales. «Los primeros análisis, hechos en una de las webs más importantes de alquileres, han sacado a la luz más de 4.500 viviendas que estarían comercializándose como producto turístico en el conjunto de la isla» de forma ilegal, indican desde la institución insular. En la actualidad, solo hay 1.500 alojamientos (5.000 camas) legalizados, y otros tantos en proceso de regulación. El 37% de los inmuebles detetados en alquiler ilegal en este primer análisis (1.057) están ubicados en Sant Josep, el 26% (738) en Ibiza, el 23% (666) en Santa Eulària, el 10% (286) en Sant Antoni y el 5% (132) en Sant Joan.
San Esteban indica: «Hay multitud de apartamentos que se compraron como inversión para alquilar, pero están ubicados en suelo residencial y no pueden tener uso turístico. La gente cuando está de vacaciones vuelve a cualquier hora, y en muchas ocasiones no se preocupan por los ruidos. Es inviable».
Por otro lado, está el tema de la contribución. Quienes alquilan legalmente, sean personas físicas o empresas, pagan sus impuestos. «Todos estos alquileres ilegales no pagan nada», denuncia San Esteban, quien afirma que «es muy importante generar temor a las multas. Hay que actuar y que la gente lo sepa, dar publicidad a las sanciones. Poner límites es beneficioso para la isla».
Erradicar el alquiler turístico ilegal podría servir para atajar el problema de vivienda que hay en Ibiza. «Tenemos gente que quiere venir a trabajar a la isla y no tiene posibilidades por falta de vivienda», indica Roberto San Esteban, quien propone que se multe a quienes alquilan ilegalmente y «dar beneficios fiscales a quienes alquilan todo el año» para dar la vuelta a la situación.
El presidente del Consell remarcó: «Hablamos de combatir una problemática que no ha hecho más que crecer en los últimos años. si seguimos como hasta ahora, está claro que el problema no hará más que crecer. Y para poner orden, lo primero que necesitamos es una mejor regulación.
Solo 1.500 alojamientos legalizados
La primera oleada de inspecciones a través de la nueva aplicación del Consell de Ibiza ha detectado entre 15.000 y 20.000 camas susceptibles de ser ilegales. «Los primeros análisis, hechos en una de las webs más importantes de alquileres, han sacado a la luz más de 4.500 viviendas que estarían comercializándose como producto turístico en el conjunto de la isla» de forma ilegal, indican desde la institución insular. En la actualidad, solo hay 1.500 alojamientos (5.000 camas) legalizados, y otros tantos en proceso de regulación. El 37% de los inmuebles detetados en alquiler ilegal en este primer análisis (1.057) están ubicados en Sant Josep, el 26% (738) en Ibiza, el 23% (666) en Santa Eulària, el 10% (286) en Sant Antoni y el 5% (132) en Sant Joan.
Artículo publicado en: másDI
Fecha publicación: 31/05/2016
Autor: Diana Blesa